Que a nadie le parezca extraño encontrar anuncios de sexo
telefónico donde mujeres se ofrecen para hacer sentir una experiencia erótica a
otras mujeres. No tiene nada que ver con la perversión. Se trata de que las
mujeres tenemos el derecho y la necesidad de sentir placer. Si los hombres no
aprenden a satisfacernos adecuadamente, entonces no tenemos por qué quedarnos
con las ganas y nos apuntamos a la línea erótica más barata de España.
Las mujeres ya sabemos eso, aunque algunas no se atrevan a
decirlo. Por eso escribo esto para ustedes, los hombres, que se sienten siempre
tan machos y que creen que las mujeres solo se interesan en ustedes en
proporción al tamaño de vuestro pene. El problema de las medidas de vuestros
órganos sexuales es asunto de vuestras fantasías y de la visión equivocada que
tienen de las mujeres. De nada nos interesa ese tema. Pueden ser mejores machos
amando adecuadamente a las mujeres, aprendiéndolas a tratar en igualdad de
condiciones fuera y dentro de la cama y dándoles placer, sin pensar solamente
en recibirlo.
Ojalá logre que este artículo los ponga a pensar y se den
cuenta las ventajas que podrían tener de cambiar vuestra actitud. Las mujeres
no solo estamos dispuestas a reclamar nuestros derechos en la calle. También
reclamamos nuestro derecho al placer en la cama.
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